2/18/2012

-Start-

Aquellos días en que eres pequeña, y estás en el salón, sola, con todas las luces apagadas menos la de aquella habitación. Jugando con tus juguetes, teniendo aventuras, dejando volar tu imaginación.
Quizás, en aquellos momentos, jamás se te abría ocurrido cómo podrías estar ahora. Quizás, en aquellos momentos, te imaginabas a tí misma comiéndote el mundo, todo te iba bien, escepto algunas que otras cosas, que darían algo de vidilla a aquella lejana visión. Tenías ganas de ser mayor, de poder disfrutar de aquellos derechos que ellos tenian. De elejir qué comer, qué estudiar, qué tener en tu habitación... o quizás nunca quisiste crecer, porque quisiste seguir estando protegido por aquellas personas que se hacían mayores.Odiando el transcurso del tiempo, de los días, de los años...y notando cómo, lo quisieramos o no, el tiempo pasaba. El cuerpo cambaba, pasábamos de curso. Incluso cambiaba la forma de tratarnos... Todo a cambiado absolútamente. Tenemos miedo, ¿qué hay que hacer? ¿en qué hay que creer? ¿qué hay que pensar?¿cómo hay que comportarse dependiendo de la situación?

¡Boom! Has crecido, sin darte cuenta, has cambiado. Ya no te sientan las golosinas en el estómago igual que cuando eras pequeña. Dependiendo del sexo, empiezas a tener barba, un poco de más masa muscular, se ensanchan los hombros, incluso la voz... a las chicas en cambio, se le desarrollan los pechos, su cintura se ensancha, sus óvulos comienan a ser activo, por lo que cada més le generará la regla hasta que esté embarazada.Tus ideas han cambiado... ¿o tal vez no?

Empiezas a filosofar, a ver el mundo exterior, diferente a cómo lo veías en casa, desde la ventana. Ya no esperas despierto el día de Navidad a que santa Claus traiga tus regalos. Ya no colocas el diente bajo la almohada para que el ratoncito Pérez lo descambie por un regalo... Comienzas a tener discusiones con tus padres, con tus amigas y amigos, ya no es nada igual. Empiezas a fijarte en otras personas. Empiezan a gustarte unos, otros... tu personalidad comienza a formarse. Experimentas, y comienzas a saber qué te gusta, qué no, tus aficiones... Ya no quieres estar tanto con tus padres como de pequeño, discutís más cada vez que intentas llevarte bien con ellos, o ellos intentar hablar contigo. Así que prefieres quedarte sólo en tu habitación. Quizás escuchando música, o tocando la guitarra, o estudiando, o dibujando...

Quieres socializarte, pero tus padres desean que estudies. Quieres escuchar música,pero tus padres quieren que estudies. Quires estudiar, pero tus padres quieren que saques un 10. Quieres descansar, pero tus padres quieren que estudies. Quieres enfermar para que no te obliguen más a estudiar, y entonces ellos, te tumban en una cama y miman... Eso te hace pensar...si enfermo, puedo incluso tener más vida que sana...
Te pasas los días en cama, y empiezas a notar algo extraño. Sólo has tenido gripe, pero han pasado semanas y aún tu cuerpo no se ha recuperado. ¿Qué pasa? estás preocupado,  pero has perdido días de clase, has hablado con tus amigos por internet, has podido descansar, escuchar música, incluso dibujar un poco cuando ellos iban a comprar... Pasan los días, y tu cuerpo se vuelve más debil. Intentas salir de la cama, hechas de menos salir con tus amigos. Pero en cuanto sales de ella estás mareado. Tus piernas apenas responden...
Los médicos no logran saber qué te pasa. Estás en cama, eres preso de ella. Lloras. Intentaste ser aquel niño de nuevo, y ahora ni siquiera podías ir a por un vaso de agua. Los días pasan largos. Al contrario que antes, ahora deseas que el tiempo pase rápido.

Conoces gente de internet, gente alegre que escucha, y tambien tienen sus problemas al igual que tú. No quieres contar nada. Cuando te preguntan cómo estas, contestas.. "bieen!!", comienzas a vivir una realidad que no es la tuya.
Después de una semana, consigues moverte. Aquella gente te trajo algo de alegría. Vas a clases, estás repitiendo, no logras concentrarte. Quizás lo pasaste mal en clases de pequeño, o tuviste algún problema con el estudio. Cuando tu madre dice que estudiar es por tu bien. Te parece ridículo. ¿Es por mi bien? ¿o es para tener más dinero?. ¿Un futuro mejor es entonces tener caprichos y dinero? pero...¿una persona feliz necesita caprichos?

Entras a clase, tus compañeros notan que esas ojeras que hoy llevas, antes no las tenías. De vez en cuando faltas una hora, dos... estás atrasada en los estudios, te duele la cabeza, y no tienes ganas de dar clases.
Empiezas a sacar peores notas. Te has alejado de tus amigos porque no tienes ganas de socializar con nadie. Tus padres se enfadan contigo. Empiezas a sentirte mal con todo. Hasta que al fín. Terminas en la depresión.

Éste blog está dedicado a esas personas. La autora de éste blog está dentro de una situación similar. Y decidió, para auto-ayudarse a ella y a las demás personas.
No tengo psicólogo, por lo que intento seguir adelante y avanzar por mis propios pasos, pero estoy tan débil que me derrumbo a la primera.
Quizás después de una reflexión de años y años, podamos empezar una segunda vida. En el que con experiencias pasadas, volvamos a tener fuerzas para enfrentarnos contra todo lo malo que se nos cruce. Será una especie de diario. Donde cada día o cada semana. Contaré mis días, que me puso más triste, y porqué. En un blog a la vista de todos.
Nunca se sabe, cuándo te puede venir un salvavidas. Pero a veces, si quieres conseguir ese salvavidas, debes ir a buscarlo.